Cuento Romantico

EL PELIGRO DE Y LAS INCONGRUENCIAS DEL AMOR

Esta historia se remonta al pasado, donde el amor era más que una sólo pasión y sexo desvalorizado, cuando los hombres aún se esforzaban por alcanzar el aprecio de una dama y la copulación  surgía como fruto de un amor de emociones reales.

John es un joven al que le tocó una vida llena de mucho dolor, fue una persona marcada y atormentada por las secuelas de su pasado. Nació en un hogar sin estabilidad económica ni emocional, sus padres se separaron por perjuicios sociales y su madre, una mujer que se preocupaba excesivamente  por ella, consiguió un padrastro poco comprensivo para su hijo quien sólo estaba con ella por disfrute carnal y aparentar un poco de estatus. A pesar de todo esto, John creció.

John llevaba una vida basada en el desprecio y tormento, aunque fue encaminado por las sendas del dinero y del gozo a cualquier costa, el joven vivía desdichado y desgraciado emocionalmente. Ahogaba sus penas en el licor, en una fría ciudad que sólo marcaba las pautas del dolor, cautivo en una prisión destinada para su propia vida, conociendo únicamente el sabor de la desdicha.

Una de sus tantas noches de copas, vio a una dama llamada Roxanne, ésta se acercó a su mesa y sin saber el cómo ni el porqué del cortejo, establecieron una conversación  que  se desenlaza en la habitación de John, donde se fundieron los dos cuerpos alcoholizados con una pasión ficticia, producto del efecto de la bebida. A la mañana siguiente, estando los dos cuerpos aún aturdidos por la maravillosa noche, por fin pudieron retomar la razón. Roxanne con los pequeños rayos de la madrugada se vistió y se despidió con un beso en la mejilla. Cuando John por fin pudo despertar, todavía entre su mente borrosas imágenes de placer, se vio al espejo confundido con lo que había pasado y se preguntó: -¿Será que por fin encontré aquello que tanto he buscado? ¿El amor por fin ha tocado a mi puerta? ¡¿Me habré enamorado?!- entre lágrimas de alegría y desorientación, sonrió y se recostó, con el propósito de dar claridad a su mente.

Días después, mientras John estaba laborando, sin previo aviso llegó una llamada de Víctor, su padrastro, para contarle que su madre se había suicidado. John sabía que Susana no había sido la mejor madre, pero aun así sentía algo por ella, por lo que sin más preámbulo, partió a la casa de su madre. A su llegada vio a su media hermana Britany, a la cual inmediatamente le preguntó: “¿Cuál era la razón de lo sucedido?” Ella no contestaba, sólo lloraba, él tomó sus brazos y agitándola le dijo: “¿qué ha pasado? ¿Por qué no me respondes?” A lo que ella contestó: -“hermano, nuestra madre decidió acabar con su vida, era una idea que tenía desde hace un tiempo, en pocos ocasiones me comentaba que por su ego perdió un hijo, que sin ser la mejor madre, lo quiso”. John lo único que pudo pronunciar  con su voz quebrantado fue: “ustedes sabían y aun así no me contaron”. Llenándose de ira, mientras las lágrimas caían por su rostro entró a la casa y al ver el féretro en la sala rompió en llanto. Cuando Víctor aviso en el cuarto, John lo golpeó  hasta el cansancio y le gritándole: “¡maldito! ¡Sabías que mi madre atentaría con su vida  y no me lo comunicaste!, ¡¿Por qué?!” Al  llegar Britany y ver la escena, logró separarlos; Víctor ensangrentado contesta: “¿Qué te pasa estúpido? tu madre nunca te quiso”. A lo que  Britany replico: “papá cállate, tú nunca le prestaste atención a mi madre, sólo la maltratabas y cuando ya no pudo mantenerte más y tuviste que trabajar, la insultabas a tal punto de hacerla llorar.” Víctor guardó silencio y John gritando dijo:” ¡imbécil! el culpable fuiste tú.” Después de un tiempo todo se silenció y un frío aterrador se apoderó de la sala.

John se acercó llorando al difunto cuerpo de su madre y así se pasó la noche sin mencionar una sola palabra. Al día siguiente en el cortejo fúnebre, el ambiente de duelo se había apoderado de todos: llegaron familiares a darle el último adiós a Susana quien fue llevada en hombros hasta su última morada y Víctor no había aparecido desde el día anterior.

Cuando llegaron a la fosa donde reposarían eternamente los restos de Susana, el féretro fue bajado lentamente, sonaban las campanas anunciando la partida de un alma, mientras sepultaban a Susana, cada palazo de arena sepultaba no sólo un cuerpo si no muchos recuerdos, cada grano de arena eran pedazos de corazones marchitos llenando un agujero más en este mundo. Después de la sepultura no quedaron más que un recuerdo de un adiós no dado, de un abrazo negado y de un te quiero no dicho.

Al final de tan conmovedor espectáculo, John y Britany volvieron a la casa de su madre y mientras John empacaba sus cosas para regresar a su residencia,  se encontró una carta, era de su madre; pero decidió leerla solamente cuando su corazón se lo permitiera.

En el retorno a casa, se desaparecieron los últimos rayos de sol, dando paso a la lluvia y una noche de misterio en donde a los muertos cantan, los búhos relataban su triste elegía, La luna y sus limpideces, a las tumbas ofrecían, y pulsaba en la luz fría, el arpa de los cipreses.

Cuando llega, con sus manos temblorosas, abre la carta y emprende  la dolorosa lectura:

John, hijo mío:

Estas no es la mejor forma de despedirme pero sólo quería decirte que estoy decidida a acabar con mi vida, no lo hago por cobardía al mundo que hay afuera de mi realidad sino por el fatigosa vida que llevo, sé que no cumplí con mi tarea de madre, el amor que te tuve nunca lo demostré y es por eso que te pido que me comprendas y me perdones algún día.

Veo la muerte como la única salida a un velo de mentiras y engaños, que lleva mi alma a romperse en mil pedazos, mi voz se entre corta, mis lágrimas caen y remojan esta hoja de papel. Sólo quiero mostrar aquello con lo que mi boca no fui capaz, mi mundo se detiene en una tristeza inmensa que me envenena, estoy vacía por dentro, no siento mi propio latir, sólo veo mi alma alejándose de mí, diciéndole a mi cuerpo que se acerca el fin donde sé que me espera el castigo eterno por mi descuido inmenso y destruir mi primer amor con el aroma de una traición.

En el arrullo de mis lágrimas sigo llenando esta página y te pido por favor  ten presente lo que te digo, confía en el amor ya que es el único que te podrá hacer sentir vivo.

Atentamente: Susana, tu madre que aún te ama”

Muchos días después de leer esto y reorganizar pensamientos, John con todo el dolor que llevaba en su alma decidió buscar a Roxanne, fue al bar y la encontró con su esposo, John quedo totalmente demacrado, destruyeron su corazón en mil y un pedazos, viendo su primer amor en los brazos de otro hombre, se fue su alma detrás de esa mujer que jugó con él de la forma más inhumana, la luz que había encontrado, el refugio cálido en una ciudad fría y maltrecha fue destruido de un soplo como si lo soltaran de lo más alto y lo dejaran caer. Al ver eso salió del bar, después de que en pensaba a creer en el amor, lo destruyen como la más bella porcelana.

Meses después de ese trago amargo aun soñando con esa mujer que llenó de calor su vida, decidió por buscarla y por acta de esta maravillosa vida, los dos se encontraron de frente al caminar por la calle, al verla sus lágrimas no pudieron contenerse más, se sentaron en una silla aledaña y John le dijo: “¿por qué acabaste con mi vida en ese instante, Roxanne? ¿Por qué no me dijiste que era únicamente un amante? ¿Por qué dejaste que me hipnotizara en el mar de tu mirar?”.

A lo que Roxanne responde: “no sé qué pasó, tú y yo no podemos ser quienes queremos ser, no seré yo quien llenará tu vacío, te amo pero no puedo dejar mi matrimonio de lado, tú me diste el calor que hacía mucho no sentía, fui egoísta lo sé, pero tengo que regresar a mi realidad, mi realidad con dos hijos y mi marido, lo siento”.

Después de esta desgarradora confesión John se paró  y se fue sin decir una solo palabra, se dirigió hacia el bar a embriagarse hasta más no poder y decía:” ¿por qué existe la mentira de una amada? ¡Todo es un fraude!”

Entre más pasaban días más enloquecía, la soñaba dormido y despierto, recordaba el olor de su piel, su cabello dorado y buscaba en el licor el recuerdo de su viejo amor, el recuerdo de esa noche.

Buscando cómo resolver el problema del amor, filosofando una y otra vez, una noche de copas condujo sin rumbo ni sentido, simplemente siguió derecho buscando dejar el dolor atrás, curar ese corazón golpeado y sacar ese ardor infernal. Presionando más el pedal fue perdiendo coherencia y sentido, mientras más aceleraba encontró una respuesta, en el más allá.

Roxanne quedó embaraza de John y decidió dejar a su esposo y a jugársela por el hombre que en verdad la había hecho sentir mujer,  el día que le fue a contar se enteró de una trágica noticia, John había muerto en un accidente automovilístico, las autoridades competentes presumen que fue alta velocidad y por su estado de embriagues.

El niño fue llamado Jonathan en honor a su padre.

AUTOR: Jesús Antonio Pérez Mesa

Comentarios del autor:

Este cuento no será como el típico cuentito de princesas y caballero, es un cuento para personas que quieran algo inesperado y poco deducible, mostrando muchos de los peligros del sentimiento más divino que se nos ha otorgado, el amor.

Y es que el amor puede dar vida y dar muerte al mismo tiempo, es el sentimiento más peligroso con el que han dotado a la humanidad.

La infidelidad de Roxanne y por qué una mujer es infiel.

En el cuento "El peligro y las incongruencias del amor" me llamó mucho la atención el papel que desarrolló Roxanne, una mujer que por razones desconocidas se fuga de su vida como esposa y madre y que en ese escape de realidad, se encuentra con quien tal vez sería el más grande amor de su vida.

Para nadie es un secreto que la mujer ha evolucionado a través de la historia de una manera tal vez lenta pero conmovedora. Y es que la mujer, al principio de los tiempos, se vió sometida a la privación de la posibilidad de educación, de trabajo y sobre todo de libre elección.

Después de tantas disputas, asesinatos y protestas, la mujer actual ocupa un lugar importante en el sociedad. Ahora una mujer tiene la capacidad y oportunidad de opinar por ella misma, y es ahí donde entra la concepción de la infidelidad femenina.

Anteriormente, cuando un hombre era visto con muchas mujeres, se consideraba todo un "don Juan" y por otro lado, si una mujer era vista con muchos hombres, era considerada una mujer "barata". Era incluso común que el hombre fuera infiel en la relación y que la mujer no pudiera más que observar y callar, pero ahora, debido a la revolución femenina, las mujeres han sabido reclamar respeto y por supuesto exigir la fidelidad por parte de su cónyuge.

Pero ¿por qué las mujeres son infieles?

Biológica y evolutivamente, se puede explicar que los hombres están más predispuestos a la infidelidad porque ellos intentan dejar su semilla en la mayor cantidad de hembras posibles, mientras que ellas una vez que quedan embarazadas no tienen necesidad de seguir buscando. Quizás esto nos permita entender el comportamiento de nuestros ancestros cavernícolas, pero no parece una explicación muy convincente para los hombres y las mujeres del siglo XXI.

Entonces realmente ¿por qué las  mujeres son infieles?

Las razones para ser infiel son innumerables, ya sea por falta de autoestima, miedo al compromiso, sentirse devaluada por la pareja, falta de atención, rutina, deficiente vida sexual, sentirse poco deseadas y atractivas por su hombre, etc.

Ya sea cualquiera de estas opciones la que llevó a Roxanne a la infidelidad, falló en algo, no luchó, no peleó por el hombre que en verdad la hacía feliz, por el hombre que en verdad amaba. Y no lo hizo por miedo, por miedo al qué dirán, cómo reaccionarán sus hijos y cómo lo verán las otras personas. Pero nunca pensó cómo se iba a sentir ELLA. Y tal vez en el momento en el que se dio cuenta que valía la pena jugársela por John, ya era demasiado tarde para ambos.